|
Desde hace ya algunos años, el gato ha comenzado a ocupar
un lugar cada vez más importante como mascota. Esto se hace evidente en
las grandes ciudades, en donde los propietarios descubren en ellos una
buena alternativa como animal de compañía debido a las escasas
exigencias de espacio que poseen. Es por esto que resulta importante
conocer cuáles son sus hábitos y costumbres, ya que nadie mejor que el
dueño conoce a su mascota y esto le va a permitir identificar cualquier
tipo de problema.
Se debe recurrir al veterinario de confianza desde el primer momento en
que adquirimos a nuestra mascota, él estará encargado, no sólo de
realizar la revisación clínica sino también de satisfacer todas nuestras
consultas y de orientarnos a cerca de cuales son los pasos a seguir. El
plan sanitario se inicia entre los 20 y 25 días de vida con la
desparasitación del gatito y que continúa a los dos meses de vida con el
inicio del plan de vacunación porque, al igual que los perros, los gatos
también se vacunan. Básicamente consiste en dos vacunas específicas que
los protegen contra el Complejo Respiratorio Felino Panleucope nia y
contra la Leucemia Felina, además de la vacuna antirrabica. El número de
dosis e intervalo entre las mismas varias según la edad del animal y del
criterio de cada profesional.
Es necesario recordar la importancia de la castración temprana siendo
ideal realizarlo alrededor de los 6 meses de vida. De esta manera además
de contribuir a controlar el número de animales vagabundos, se evita
entre los machos las peleas territoriales durante las cuales no sólo se
lastiman sino que además pueden transmitirse graves enfermedades. Por su
parte en las hembras minimizamos el riesgo de aparición de tumores de
mama.
Durante toda su vida:
•Aplicar regularmente una pipeta para evitar la presencia de pulgas,
principalmente durante los periodos de altas temperaturas.
•Cepillar periódicamente a aquellos que posee pelo largo, evitando la
formación de nudos que pueden lastimar la piel y la ingestión del mismo
durante el aseo.
•Ofrecerles agua limpia fresca, ya que son muy exigentes en cuanto a la
calidad de la misma aunque no son grandes bebedores. En cuanto al
alimento optimizar la calidad del mismo, teniendo en cuenta además que
comen varias veces por día en pequeñas cantidades.
¿Cuándo se debe consultar entonces?
•Si se observa tos, estornudos o secreción en los ojos y/o nariz.
•Ante la presencia de vómitos o diarrea.
•Si acude a su litera reiteradamente pero no orina o lo realiza en forma
escasa.
•Si tiene desinterés por el aseo, su pelaje se observa opaco o
apelmazado.
•Si se aísla o esconde, tiene intención de comer o beber pero no lo
realiza.
En estado óptimo de salud, cada vez que surjan dudas o inquietudes,
sabiendo que es el veterinario el único capaz de contribuir en la toma
de decisiones a través de sus consejos y es absoluta responsabilidad de
los propietarios tenerlos en cuenta y ponerlos en práctica, porque como
se dice siempre es mejor prevenir que curar.
Dra. Guillermina Vendroni
Planeta Veterinario
San Martín 284 - Pilar
lectores@linkpilar.com.ar
ver otras notas
de Planeta Veterinario
|