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En el número anterior, un error no permitió que salieran los últimos
renglones de esta historia, y por consiguiente, no se rindió el justo
homenaje a sus protagonistas.
El Dr. Luis Murad relataba
los lugares donde jugaban al fútbol los equipos de barrio...
“..pero el fútbol en serio se jugaba en la cancha los domingos por la
tarde, llenando las precarias instalaciones con hinchadas que hervían
especialmente en el clásico Atlético y Sportivo. Adentro " a cara
de perro", con pierna fuerte y mucha vehemencia. Algo para
mencionar. Fuera de la cancha, todos amigos y se los podía ver
compartiendo comentarios en la matinée de la noche.
A esta altura del relato, el lector me permitirá expresar una
experiencia personal que avala lo antedicho " Ya cuando Italo
Tropiano, uno de los delanteros mas completos de los últimos tiempos,
vivía en sillas de ruedas, fuimos a visitarlo con Emilio Toppazzini
(notable jugador de Atlético, recientemente fallecido) y Andrés
“Yayo”López ( ex-Intendente Municipal de Pilar). Por supuesto que
el tema excluyente era el fútbol de nuestro tiempo. La Señora de Italo
presenciaba la larga conversación y en un momento de dije " Señora
, usted se está aburriendo con nosotros" a lo que me contestó que
estaba escuchando temas nuevos para ella y se mantuvo en la rueda.
Mientras tanto nosotros le acercábamos palabras afectivas a quien
tantas veces enfrentamos en una cancha de fútbol y no siempre de las
mejores maneras. En un momento de dije " Italo, vos y yo siempre
hemos transitado por veredas opuestas, vos de Sportivo, yo de Atlético,
vos de Racing, yo de Independiente, cosas de la vida. Tiempo después se
manifestaba orgulloso de que lo fueran a ver tres hombres de Atlético,
dos de los cuales fueron Intendentes, decía.
Siempre recuerdo sus saltos felinos, sus dos piernas potentes que el
destino las llevó a la silla de rueda.
Lejos estábamos de pensar que este encuentro sería el último "
EL CARLOS PELLEGRINI
Así se lo conocía en el medio local al Establecimiento Carlos
Pellegrini, dependiente del entonces Ministerio de Justicia e Instrucción
Pública, que en tiempos del Pueblo, constituyó un motivo de natural
orgullo.
Recibía a chicos con problemas familiares y muchos otros mas, para
moldearlos en sus confortables instalaciones, con mucha instrucción y
deportes, buena y abundante comida.
Como detalle, vale la pena mencionar que los platos, tazas y pocillos,
de pocelana de Verbano, tenían grabadas la leyenda "
Establecimiento Carlos Pellegrini", una esquisitez
La población crecía en la confrontación deportiva, en sus canchas de
fútbol, pelota a Paleta, Pista de atletismo, pileta de natación, etc.
Eran alrrededor de ciento veinte alumnos que se reeducaban, alcanzaban
una instrucción secundaria y se convertían en la admiración de las
"chicas" que suspiraban por cada uno de ellos. Tengamos en
cuenta que el Colegio Carlos Pellegrini era único con secundario en una
población general que, con generosidad, llegaba a 6o. grado.
Es de señalar que en la inauguración del Estadio de River Plate, en
1939, antes del partido entre River Plate y Peñarol de Montevideo, una
posta de atletas portando una llama votiva desde el Establecimiento
Carlos Pellegrini a la cancha a inaugurarse, siendo el alumnno Ovejero
el encargado de entregarla momentos antes que comenzaran los actos. Un
motivo de orgullo.
Esos chicos que ingresaron con problemas sociales, egresaron como
personas de bien, muchos de los cuales se quedaron a vivir en Pilar,
formando honorables familias.
A riesgos de omisiones, mencionaremos a Rafael Martell, Juan Carlos
Cenobio, Roberto Torres, Alfredo Altieri, Ricardo Sainetti, Kemerer,
Ernesto Maciono, Douglas Morán, Pedro Luis Quevedo, Rodolfo Rodríguez
(Raffo), Cipriano Gómez, entre muchos otros.
En los mencionados y los involuntariamente omitidos, va nuestro respeto
y el homenaje a una Institución modelo, que trajo a Pilar un saludable
aire de educación y cultura, que con el tiempo hemos podido valorar en
toda su magnitud.
(ver
la primera nota) - (ver
la segunda nota) - (ver
la tercera nota)
(ver la cuarta nota)
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