- TRIPLE
CRIMEN
Detienen al mexicano al que Forza le quiso robar el negocio de la
efedrina
Es Rodrigo Iturbe. Un testigo había dicho que era quien enviaba
efedrina a México.
El triple crimen de General Rodríguez ya tiene un detenido: se trata
del ciudadano mexicano Rodrigo Iturbe, conocido también como "Rodrigo
Rodríguez", señalado por un testigo como el hombre para el que
Leopoldo Bina sacaba efedrina del país y a quien Sebastián Forza
habría tratado de arrebatarle el negocio convenciendo a Bina de que
trabajara para él.
La detención de Rodríguez ocurrió ayer en Sevilla 2990, en el Barrio
Parque de Capital, justo el mismo día en que la Corte Suprema de
Justicia de la Nación resolvió que la causa del triple crimen debe ser
investigada por la Justicia Penal de Mercedes, que tiene jurisdicción
en el lugar donde los tres jóvenes fueron hallados asesinados hace 70
días (Ver El triple...).
Del operativo participaron policías de la División Búsqueda de
Personas de la Federal, por orden de la fiscal Ana María Yacobucci,
quien indagará al detenido hoy. Voceros del caso dijeron a Clarín que
son inminentes más arrestos.
Según contaron las fuentes, Iturbe fue mencionado tanto en la causa de
los narcos mexicanos que investiga el juez federal de Campana Federico
Faggionatto Márquez, como en la que lleva adelante Yacobucci por los
homicidios de Forza, Bina y Damián Ferrón, que se descubrió el 13 de
agosto cerca de la ruta 6, en General Rodríguez, seis días después de
que los tres jóvenes habían desaparecido.
La semana pasada, el médico cirujano Gustavo Ricchiuto (42), socio de
José Luis Salerno, Forza y Ferrón en el negocio de los medicamentos,
declaró ante Faggionatto Márquez que éstos se reunieron con Bina y un
mexicano de nombre "Rodrigo" el 25 de julio en el Bar Open de Pilar.
El médico contó además (el testimonio está en la foja 1016 vuelta del
expediente, al que accedió Clarín) que "Salerno le dijo que Bina era
empleado del mexicano y encargado de sacar subrepticiamente la
efedrina del país". Pero además Salerno le habría dicho que "Bina
trabajaba para el mexicano y cobraba 17.000 pesos por mes". Según
Ricchiuto, Salerno le contó que el tal "Rodrigo" estuvo apenas 15
minutos y que, cuando se fue, "Forza le ofreció a Bina que trabajara
directamente para él, sacando mercadería con destino a Panamá". Es
decir, que le pidió que traicionara al mexicano para quedarse ellos
con el negocio. El testimonio y los detalles de la reunión son
relevantes: la hipótesis de un "ajuste de cuentas" por una traición
fue desde el principio la sospecha más fuerte del caso.
El negocio --según reconoció el testigo ante Yacobucci y ante el juez
de Campana, que sigue la ruta de la efedrina- "preveía la entrega de
400 kilos de efedrina por semana. Salerno y Ferrón serían quienes la
conseguirían a través de una droguería".
Sin embargo, las declaraciones no conforman a Miguel Angel Pierri y
Rubén Ramírez (abogados de las viudas): Salerno en ningún momento hizo
mención a ese tipo de negocios con su ex socio. Por el contrario, dijo
que "Ferrón trabajaba con las ventas a los clientes institucionales de
la farmacia y estaba por cerrar un negocio en Salta por la venta de
soluciones de dextrosa, y con droguerías para que le entregaran
mercadería para la obra social de Bancarios". Sí admitió que se reunió
con las víctimas e incluso con Ricchiuto en Pilar para "empezar a
operar comercialmente".
Según las fuentes, Salerno tendría que explicar por qué Ricchiuto
aseguró que en esa reunión de julio Salerno conocía a Bina y lo
llamaba "Leo", aunque el 8 de agosto, cuando declaró ante la fiscal,
dijo que no lo conocía.
http://www.clarin.com/diario/2008/10/22/policiales/g-01786419.htm
La Corte decidió que la causa del triple crimen sea investigada por la
Justicia de Mercedes
15:38
De esa manera terminó con el conflicto de competencias. El caso
quedará en manos del juez Marcelo Romero, que tiene jurisdicción sobre
el lugar donde aparecieron los cuerpos. El abogado querellante había
reclamado que pase a la órbita del juzgado federal de Campana, a cargo
de Faggionato Márquez.
La Corte Suprema de Justicia dispuso hoy que la investigación por el
triple crimen de los empresarios quede a cargo de la justicia de
Mercedes y no del juez federal de Campana, Federico Faggionato Marquez,
que lleva la causa por el tráfico de efedrina, ya que "aún no es
manifiesta la conveniencia" de que sen tratados por el mismo juez.
El máximo tribunal no hizo lugar a un dictamen de la Procuración
General de la Nación, que había recomendado que la investigación del
crimen de los tres empresarios (Sebastián Forza, Leopoldo Bina y
Damián Ferrón) la lleve adelante Faggionato Márquez por entender que
hay hechos que los vinculan con el tráfico de drogas.
La Corte sostuvo que "cualquiera sea el vínculo de conexión final que
pueda existir entre hechos que se presentan prima facie como
independientes, ellos deben ser investigados por los jueces del lugar
en que se aparecen cometidos".
El triple homicidio generó una disputa entre el juez de Mercedes
Marcelo Romero Mercedes (que tiene jurisdicción sobre el lugar donde
aparecieron los cuerpos) y el de instrucción Rodrigo Paggano Mata,
quienes declinaron su competencia.
El fallo de la Corte, firmado por Ricardo Lorenzetti, Carlos Fayt,
Enrique Petracchi, Juan Carlos Maqueda y Carmen Argibay, sostuvo que
los cuerpos de las víctimas fueron encontrados en la localidad de
General Rodríguez por lo tanto "se desprende que los homicidios
habrían ocurrido allí", y así la causa deber ser investigada por
Romero.
Por su parte, la jueza Elena Highton de Nolasco se inclinó por el
dictamen del procurador Luis González Warcalde, quien sostuvo que el
triple crimen debería ser investigado por Faggionato Márquez.
http://www.clarin.com/diario/2008/10/21/um/m-01786192.htm
Ordenan la detención de Salerno, ex socio de una de las víctimas del
triple crimen
19:53
La medida fue dictada por el juez Faggionato Márquez. Salerno es un ex
policía bonaerense que tenía una droguería y era socio de Damián
Ferrón, uno de los tres jóvenes asesinados en General Rodríguez. Un
testigo sostiene que el empresario conoce los detalles de los negocios
con medicamentos y efedrina.
Salerno, socio de Damián Ferrón, en la mira del juez. (TN)
1
Desde un primer momento el nombre de José Luis Salerno estuvo rodeado
de misterio y se lo vinculó al caso del triple crimen de General
Rodríguez. La versión era que sabía mucho sobre el negocio que terminó
en esa tragedia. Hoy, el juez federal de Campana, Federico Faggionato
Márquez, ordenó su detención.
Salerno, de 42 años, es un ex policía bonaerense que cumplió parte de
su carrera en General Rodríguez. Es además dueño de la farmacia
Fharmaz Group; ex socio de Ferrón –una de las víctimas del triple
crimen- y su amigo desde que tenía 15 años.
El abogado de Salerno, Herman Schumacher, advirtió hoy que aún no fue
notificado de ninguna orden de captura contra su cliente, pero aseguró
que se va a "ajustar a derecho porque es inocente de cualquier
delito".
La querella de las víctimas del triple crimen de General Rodríguez
asegura que el hombre sabe mucho más de lo que contó hasta ahora. Un
testigo lo ubica en reuniones importantes y afirma que tiene detalles
de los negocios de los medicamentos y de la efedrina.
Además, es el hombre que -según declaró un médico en el expediente-
vio cuando Sebastián Forza, víctima del triple crimen junto con Damián
Ferrón y Leopoldo Bina, intentó quedarse con el negocio de la efedrina
de un mexicano.
Se ha convertido en un personaje clave desde el momento en que el
médico Gustavo Ricchiuto declaró ante la fiscal Ana María Yacobucci, a
cargo del triple crimen hasta que la Corte decida, probablemente
mañana, quién debe seguir al frente del caso.
El cirujano Ricchiuto aseguró que el 25 de julio (apenas dos semanas
antes de que los tres jóvenes fueran asesinados) se hizo una reunión
en el Bar Open del edificio Concorde, en Pilar. "Allí estaban Salerno,
Ferrón, Forza, Bina y una persona recién llegada de México, de nombre
Rodrigo, con intenciones de comercializar efedrina, operación que
efectuarían Salerno, Forza y Ferrón", dijo.
El médico contó además (el testimonio está en la foja 1016 vuelta del
expediente, al que accedió Clarín) que "Salerno le dijo que Bina era
empleado del mexicano y encargado de sacar subrepticiamente la
efedrina del país". Pero además Salerno le habría dicho que "Bina
trabajaba para el mexicano y cobraba 17.000 pesos por mes".
Según Ricchiuto, Salerno le contó que el tal Rodrigo estuvo apenas 15
minutos y que, cuando se fue, "Forza le ofreció a Bina que trabajara
directamente para él, sacando mercadería con destino a Panamá". Es
decir, que le pidió que traicionara al mexicano para quedarse ellos
con el negocio.
El testimonio y los detalles de la reunión son relevantes: la
hipótesis de un "ajuste de cuentas" por una traición fue desde el
principio la sospecha más fuerte del caso.
http://www.clarin.com/diario/2008/10/23/um/m-01787661.htm
Triple crímen y efedrina
"Ricky" Martínez declaró, negó todo y seguirá preso
El padre del actor Mariano Martínez estuvo varias horas ante el juez.
Se despegó del tema efedrina y dijo que estuvo con el mexicano
Martínez Espinosa "porque lo amenazaba"
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24.10.2008
Las explicaciones de "Ricky" Martínez no lograron cambiar su triste
momento: lo mandaron nuevamente a la cárcel de Ezeiza. | Foto: Cedoc
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Tras un imprevisto cambio en la defensa y con la compañía de su hijo
Mariano Martínez, el empresario Sergio Ricardo "Ricky" Martínez negó
anoche ante la Justicia haber participado del negocio en torno a la
"ruta de la efedrina", intentando despegarse de las sospechas que lo
relacionan con el caso. Lo cierto es que Martínez seguirá presa en la
cárcel de Ezeiza.
Martínez no sólo negó haber participado de la venta de efedrina, sino
que rechazó los vínculos con la banda de narcotraficantes mexicanos
que fueron detectados en un laboratorio de Ingeniero Maschwitz. Y
respecto a las ocasiones en que se lo habría visto con el mexicano
Jesús Martínez Espinoza -detenido en Paraguay y a punto de ser
extraditado- "fue porque este lo amenazaba".
Tanto la indagatoria -que se esperaba para el próximo lunes- como el
cambio de abogados fue una novedad para los medios de prensa que, un
rato después, se enteraron de la orden de captura contra el policía y
empresario farmacéutico José Luis Salerno, ex socio del asesinado
Damián Ferrón.
El nuevo abogado de Martínez, Carlos Olita, desplazó al letrado Daniel
Borojovich, del estudio de Alejandro Argibay Molina, quien en un
primer momento había dicho públicamente que Martínez era representante
de su hijo y que no tenía vínculos con la efedrina.
La de ayer fue la primera vez que "Ricky" Martínez da su versión sobre
su presunta vinculación con el negocio, en una causa en la que el juez
Federico Faggionato Márquez lo tiene como sospechoso de narcotráfico.
Martínez, que había sido detenido hace exactamente una semana cerca de
un cibercafé del centro porteño, no había podido prestar declaración
porque sufrió una descompensación de salud que obligó a suspender el
trámite.
La defensa solicitó tiempo para conocer el expediente y se había
indicado que la indagatoria se concretaría el próximo lunes. Pero ayer
al mediodía Martínez fue llevado desde su lugar de detención hasta el
juzgado para contar suy versión ante Faggionato Márquez. Según
trascendió, el actor Mariano Martínez llegó discretamente a acompañar
a su padre y habría informado al juzgado sobre la nueva defensa.
El lunes pasado, el actor rompió el silencio para respaldar
públicamente a su padre: "Creo en mi papá hasta que la Justicia me
demuestre lo contrario", dijo, y pidió que "no se digan mentiras".
Faggionato Márquez admitió públicamente que hay una serie de elementos
que obligaron a detener al padre del actor porque la acusación que
pesa en su contra no es excarcelable, y aseguró que como la
indagatoria es un "acto de defensa", el empresario tendrá que explicar
los cruces telefónicos que se detectaron entre él, el mexicano Jesús
Martínez Espinoza -detenido en Paraguay- y Sebastián Forza, otro de
los empresarios asesinados en General Rodríguez.
"Ricky" Martínez fue señalado por un testigo como supuesto proveedor
de la efedrina a la presunta banda de Martínez Espinoza y de tener
vinculación con Forza, Ferrón y Leopoldo Bina, los empresarios
asesinados hace más de dos meses.
Faggionato Márquez lleva adelante una causa por infracción a la ley de
drogas, iniciada el 18 de julio, cuando se desmanteló un laboratorio
de metanfetaminas en una casaquinta de Ingeniero Maschwitz, en el
norte del Gran Buenos Aires, y se detuvo a nueve mexicanos y al
argentino Marcelo Tarzia. El 7 de agosto, en tanto, Forza, Bina y
Ferrón fueron secuestrados cuando estaban por cerrar un negocio que,
se sospecha, tenía vinculación con la efedrina, y aparecieron
fusilados el 13 de agosto en un descampado, en el marco de lo que se
consideró un "crimen mafioso".
El testimonio que el cirujano plástico Gustavo Ricchiuto dio en la
causa que investiga el crimen y que la semana pasada profundizó la
investigación por la efedrina llevó al juez Faggionato Márquez a
disponer la detención de Martínez por su presunta vinculación con
Forza, quien -a su vez- la habría comercializado con la banda de
mexicanos. Ricchiuto sostuvo en su declaración que Forza, Bina y
Ferrón planeaban venderle efedrina a los mexicanos y que la sustancia
se las habría provisto "Ricky" Martínez.
Fuente: DYN
http://www.perfil.com/contenidos/2008/10/24/noticia_0002.html
Avanza la causa por el tráfico de efedrina
Triple Crímen: ordenan la captura de Salerno
El juez Faggionatto Márquez pidió su detención y los letrados aseguran
que el ex socio de Damián Ferrón se entregará en las próximas horas.
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24.10.2008 | 01:50
La Justicia ordenó la captura de José Luis Salerno, el ex socio del
asesinado Damian Ferrón que fue sindicado como uno de los principales
proveedores de efedrina y, aunque hasta esta noche el empresario no
había sido detenido su defensa prometió que no se va a fugar y se
entregará porque considera que es inocente. Fuentes judiciales
revelaron a DyN que el arresto fue ordenado por el juez federal de
Zárate-Campana Federico Faggionato Márquez quien, además, dictó la
captura de ochos ocho mexicanos que están sospechados de narcotráfico
luego de la indagatoria del anterior detenido, el también azteca
Rodrigo Iturbe.
La noticia de la captura de Salerno se conoció cuando en el juzgado
indagaban a Sergio Ricardo "Ricky" Martínez, el padre del actor
Mariano Martínez, que está detenido desde hace una semana y cuya
indagatoria también fue imprevista, ya que se esperaba que
compareciera el lunes próximo. La sorpresa incluyó además un repentino
cambio de defensa para el padre del actor, que se presentó en los
tribunales para acompañar a su progenitor.
Pero mientras "Ricky" Martínez daba su versión en el caso de la
efedrina, un canal de noticias difundió la orden de captura contra
Salerno, un policía bonaerense retirado vinculado desde 2003 a la
firma Fharmaz Group S.R.L. en la que Ferrón figuraba primero como
socio y luego como empleado. La policía ni siquiera lo había ido a
buscar, su abogado defensor no sabía de su captura y en el juzgado se
mostraron molestos por la filtración de la noticia, según pudo saber
DyN.
Poco después, el abogado Miguel Angel Pierri, defensor de las viudas
de los tres empresarios asesinados -Ferrón, Sebastián Forza y Leopoldo
Bina-, confirmó la orden de captura contra Salerno y anunció que,
desde la querella, se lo acusará de haber instigado el triple crimen.
"Faggionato lo va a acusar por infracción a la ley de narcotráfico,
pero nosotros lo vamos a acusar de instigador, de haber sido el que
estuvo en el armado del homicidio", aseguró el abogado.
Salerno había declarado dos veces en la causa por el triple crimen
ante la fiscal porteña Ana Yacobucci: según Pierri, en la primera
oportunidad dijo que no sabía nada, y en la segunda admitió conocer a
todos los personajes. "Se pide a la luz del testimonio del cirujano
Gustavo Ricchiuto, porque dijo que había prueba documental muy
importante que podía estar en la casa de Salerno. Pedimos entonces el
allanamiento a su casa, pero el juez no hizo lugar porque quería más
pruebas. Con un nuevo testimonio y el del mexicano Rodrigo Iturbe
volvimos a pedir su detención", explicó a DyN Pierri.
Pierri aseguró que no sólo lo comprometió Ricchiuto, sino también los
detenidos Armando Giuliani -sospechado en el caso de la efedrina- e
Iturbe. "Salerno tiene cruces telefónicos el día de la desaparición en
la zona de General Rodríguez. Salerno está en el medio de todos los
negocios. No lo podemos imputar del homicidio, pero esta es la
detención más importante ordenada en la causa", afirmó a DyN el
abogado.
Para la querella aún quedan por detener "dos personas que tienen
perfil o motivo para ser la mano de obra" Mientras tanto, Salerno
anunció a través de su defensa que se entregará a la Justicia porque
es inocente y exigió respetar su derecho de defensa para que no se lo
sindique como un culpable mediáticamente. El abogado de José Luis
Salerno, Herman Schumacher, advirtió que aún no fue notificado de
ninguna orden de captura en su contra, pero aseguró que su cliente se
va a "ajustar a derecho porque es inocente de cualquier delito".
"El se va ajustar a derecho porque no tiene nada que ocultar, no se va
a profugar ni obstaculizar a la Justicia. Sí va a usar todo su derecho
defensa para ser liberado", afirmó el letrado en diálogo con radio 10.
Un rato después añadió: "Nos enteramos por los medios, estoy
escuchando que se habla de pruebas contra él que figuran en la causa y
que no sé de dónde salen porque son totalmente mentiras. No me parece
serio que se anuncie la detención por los medios".
Fuente: DYN
http://www.perfil.com/contenidos/2008/10/24/noticia_0003.html
Triple crimen: Ricky Martínez admitió que conocía a
Sebastián Forza
21:48
Al declarar ante el juez, el padre del actor Mariano Martínez sostuvo
que lo conoció hace 7 años y que lo había dejado de ver. Pero que
recientemente lo había contactado otra vez. También dijo que se reunió
con Martínez Espinoza. Pero aclaró que nunca estuvo en el negocio
ilegal de efedrina.
La causa sobre el triple crimen de General Rodríguez sigue generando
sorpresas. Sergio Ricardo "Ricky" Martínez reconoció ante el juez que
conocía al asesinado Sebastián Forza y que se reunió con el supuesto
narcotraficante mexicano Jesús Martínez Espinoza, pero rechazó una y
otra vez tener vinculación con el negocio de la efedrina.
Durante cuatro horas el detenido, padre del actor Mariano Martínez,
estuvo con el magistrado Federico Faggionato Márquez dando detalles.
Es más, pidió enfrentarse cara a cara con el cirujano Gustavo
Ricchiuto, testigo clave en el caso, y el detenido Armando Giuliani,
para desmentir las afirmaciones que lo involucraron en la causa.
Martínez afirmó que Ricchiuto fue una persona "totalmente plantada en
la causa para involucrarlo", pero no pudo explicar por qué lo ligaban
al caso, y hasta pidió desprender a su hijo del escándalo porque -explicó-
lo une la cuestión afectiva pero tiene poca relación con él en su vida
diaria, agregaron las fuentes.
Según fuentes de la investigación, "Martínez dijo que estuvo en
lugares comunes con gente que estaba tratando de hacer negocios no
genuinos. Afirmó que como él se dedicaba a hacer negocios vinculados
con el rubro, era buscado en determinadas situaciones, pero aclaró que
nunca estuvo al tanto del negocio de la efedrina".
En ese sentido, Martínez aseguró que "no tenía idea de qué tipo de
negocios iban a hacer; siempre habló de un posible negocio de
indumentaria de calzado o curtiembre". Tras esta declaración, Martínez
volvió luego a la cárcel de Ezeiza donde espera ahora los careos que
se realizarían la semana próxima.
"Ricky" Martínez fue detenido hace una semana, luego de que un testigo
lo señalara como supuesto proveedor de la efedrina a la presunta banda
de Martínez Espinoza y de tener vinculación con Sebastián Forza.
El cirujano plástico Gustavo Ricchiuto sostuvo en su declaración que
Forza, Leopoldo Bina y Damián Ferrón –los tres asesinados- planeaban
venderle efedrina a los mexicanos y que la sustancia se las habría
provisto "Ricky" Martínez.
En su indagatoria, Martínez primero negó el cargo principal por el
tráfico de estupefacientes y la comercialización de efedrina, y
aseguró que recién se enteró del tema de la droga cuando los mexicanos
y Tarzia fueron detenidos tras el allanamiento.
A lo largo de las preguntas, el padre del actor explicó que conocía a
varios de los personajes principales mencionados en la historia: Forza,
Martínez Espinoza y Tarzia, el argentino que habría sido el gestor de
los mexicanos.
Martínez explicó que tenía una empresa de limpieza pero siempre estuvo
vinculado a la política y que, en ese marco, se relacionó con el
Ministerio de Salud durante la gestión de la Alianza, que le permitió
conocer gente vinculada al mundo de los laboratorios.
Según su versión, en ese marco conoció a Tarzia, que le pidió si podía
conseguir algún laboratorio para comprar y le solicitó recomendaciones
para localizar algún despachante. Aseguró que durante esas reuniones
vio en tres o cuatro oportunidades a Martínez Espinoza. "Sólo lo
conocía y nada más, no tuve trato", dijo el imputado en su
declaración.
A Forza, en cambio, dijo Martínez, lo conoció a través de un familiar
que tenía relación con Martín Magallanes, dueño de la droguería
Unifarm y el socio en común que tenían Sebastián Forza y Ariel Vilán,
el joven que se suicidó tras enterarse del triple crimen.
Martínez explicó que a Forza lo conoció hace siete años y que lo había
dejado de ver, pero recientemente la víctima lo habría contactado:
como él quería vender su laboratorio, el joven asesinado lo habría
buscado porque sabía que el padre del actor estaba vinculado a esa
clase de operaciones.
(Fuente: DyN)
http://www.clarin.com/diario/2008/10/24/um/m-01788534.htm
LOS FIERROS DEL JOVEN EMPRESARIO
El petit arsenal de Forza
Aunque la víctima del triple crimen tenía una veintena de denuncias,
el Renar le autorizó la portación de seis armas de guerra. Jorge
Lanata.
El jueves 7 de agosto, a la ocho de la noche, una camioneta Chevrolet
Grand Vitara bordó ardía en Galicia 2789, a pocas cuadras del Hospital
Israelita. Nadie vinculaba entonces aquel incendio con los tres
cadáveres que aparecerían seis días después en un zanjón de General
Rodríguez. La camioneta era de uno de los tres fusilados: Damián
Ferrón, y entre las llamas podía adivinarse la chapa: DXP-095. El
principal Jorge Villanueva, a cargo de los bomberos, registró el
interior del auto y encontró allí algunas pertenencias de Ferrón y
otras de Sebastián Forza: una cédula de identidad, credenciales verdes
de “legítimo usuario” de dos armas y un carnet azul de portación con
legajo 3-23866777 otorgado por el RENAR. Impresionados por las llamas,
ninguno de los bomberos reparó en el detalle: las credenciales de
Forza estaban autorizadas desde el 27 de septiembre de 2007 hasta el 1
de octubre de 2008. Habían sido expedidas en el año más restrictivo
del RENAR, que restringió las autorizaciones de portación después del
escándalo del tirador de Belgrano, Martín Ríos, asesino de Adrián
Marcenac, sucedido en 2006. El francotirador de Belgrano tenía permiso
para portar armas a pesar de no haber cumplido jamás con el test
psicológico indispensable y su certificado de salud estaba firmado por
un traumatólogo. Aquella noche del 7 de agosto, un arma ardía entre el
fuego que devoraba la camioneta: “Se encontró una corredera con su
respectivo caño – dice el reporte policial adjunto al expediente que
se instruyó en la fiscalía de Ana Yacobucci y ahora pasó, por decisión
de la Corte, a la Justicia de Mercedes – con la inscripción Taurus PT
111, calibre 9 milímetros, sin numeración visible y un cargador vacío
perteneciente a esa arma”.
A las 20.09 del día siguiente, la División Armas y Agencias despachó
una nota de urgencia informando que en el sistema del RENAR, a nombre
de Sebastián Forza, sólo existía aquella pistola Taurus.
–Forza tenía como 15 o 20 causas –explicó días después el ministro
Aníbal Fernández al público de Radio 10 . Adulteraba medicamentos o
proveía remedios prohibidos.
–Por eso, en su momento, el Gobierno lo sancionó y le canceló la
habilitación como droguería –abundó.
–¿La empresa Seacamp, de Forza, le vendió drogas oncológicas y contra
el sida por 4.281.000 pesos al Hospital Francés cuando estaba
intervenido?
–Es posible –refunfuñó Aníbal con menos entusiasmo. Si tenía “como 15
o 20 causas por adulteración o ventas prohibidas”, ¿cómo era proveedor
del Estado? La respuesta llevaba a Capaccioli; y Capaccioli, como
informó este diario el pasado domingo, es un viaje directo al lavado
de dinero para la campaña.
Recién comenzaba a desenredarse la madeja del triple crimen y las
usinas de información trabajaban a tiempo completo: debía quedar claro
que era un problema de los narcos mexicanos. Los diarios se llenaron
con notas de análisis sobre los asesinatos en los que se aseguraba que
los habían fusilado arrodillados, con disparos por la espalda, y que
así lo señalaba el manual básico del narco. Nadie estaba autorizado a
pensar entonces que la policía argentina tiene las mismas prácticas.
Tampoco se hablaba demasiado de la mafia de los medicamentos y mucho
menos, claro, sobre los aportes de campaña de monotributistas que,
pletóricos de cristinismo, donaban doscientos o trescientos mil pesos
al Frente para la Victoria.
Veinte días después, la lista de armas autorizadas a nombre de Forza
aumentó en proporción geométrica: tenía seis, estaba equipado como
para ir a la guerra de Irak.
Seis armas y quince o veinte causas: Aníbal Fernández habló de más.
Forza estaba autorizado por un organismo de su dependencia y diversas
fuentes coinciden en afirmar que el trámite fue rápido, discreto y
hecho por un operador del ministro de Justicia, Seguridad y Derechos
Humanos.
UN REGALO IDEAL PARA EL DÍA DE LA MADRE. Aunque nos hayamos pasado un
poco de la fecha, imaginemos que usted quiere hacerle a su madre un
regalo original: una pistola ametralladora P 90 con munición calibre
5.7, por ejemplo. Mamá debería, entonces, convertirse primero en lo
que se denomina “legítimo usuario”. La “tarjeta verde” se renueva cada
cinco años, el trámite cuesta entre 90 y 125 pesos y se requiere:
–Acreditar medios lícitos de vida (documentación impositiva, salarial,
de actividad económica, etc.).
–No tener antecedentes penales.
–Hacer un examen psicofísico.
–Acreditar idoneidad en el manejo de armas.
Forza tenía la credencial de legítimo usuario desde antes de 2007,
pero nunca había conseguido la portación.
Cuando compre la pistola ametralladora para mamá, recuerde que debe
tener también la “tarjeta roja”. Eso cuesta entre 50 y 70 pesos, y 20
pesos la tarjeta que habilita para la compra de municiones.
Pero lo verdaderamente complicado de conseguir es la credencial azul,
que es la que autoriza a que el usuario pueda llevar el arma consigo.
El propio RENAR afirma: “Las portaciones son de carácter restrictivo y
su eventual otorgamiento dependerá de la debida acreditación de las
fundadas razones que justifiquen el mismo”. Cada autorización de
portación es analizada por una Comisión de Evaluación Permanente en
Materia de Portaciones y Sanciones. El costo del trámite es de 260
pesos.
–La portación estuvo muy difícil el año pasado, dieron pocas –le dijo
a Crítica de la Argentina un abogado aficionado al tiro que no
consiguió que se la renovaran aun cuando argumentó que, por las causas
que defiende, recibe constantes amenazas. Tampoco le autorizaron
portar armas a un empresario que sufrió un
secuestro. Y un ex jefe policial aseguró a este diario que mientras en
años anteriores la renovación era casi automática, en 2007 le demoró
varios meses.
–Y eso que soy maestro instructor de tiro –se quejó.
Sebastián Forza, “con 15 o 20 causas”, pudo hacerse de su credencial
azul y a través del dictamen 001768 del 27 de agosto emitido por el
Ministerio de Justicia-RENAR se informó a la fiscal que Forza tenía
seis armas y una credencial de portación. El informe está firmado por
Juan Adolfo Maida y Ariana Carpenzano, dos abogados de la Coordinación
de Asuntos Jurídicos del organismo y da el detalle sobre las armas de
Forza:
–Una pistola semiautomática Glock, calibre 40, número de serie ERM263.
–Una pistola semiautomática Tanfoglio, calibre 40, número de serie
MO3553.
–Un revólver de acción doble Colt, calibre .357, número de serie
T80722.
–Una pistola semiautomática Taurus, calibre .9, número de serie
TWC42825.
–Un revólver de acción doble Taurus, calibre .357, número de serie
UJ913472.
–Una pistola semiautomática Beretta, calibre .9, número de serie
X00012Z.
LO ÚLTIMO QUE ME FALTABA. Hay, en toda esta historia, un fantasma. Su
nombre causa una sonrisa en quienes lo escuchan y, les juro, no tiene
nada que ver conmigo. Se llama Martín Lanata, tiene 34 años y es de
Quilmes. Martín Lanata fue quien gestionó la autorización de Forza.
–Trabajo para Aníbal –afirmó, serio, Martín Lanata en una reunión con
Sebastián Forza, su empleado Gustavo Álvarez y el agente de la DEA y
monotributista Julio Posse. En el entorno de Forza y en los pasillos
de la política quilmeña lo señalan como un operador en las sombras de
Aníbal Fernández.
–Siempre en segundos planos, pero muy operativo –le confió una fuente
de Quilmes a este diario.
–No lo conocemos, nunca tuvimos trato. Hay muchos que usan el nombre
de Aníbal, pero te aseguro que no es alguien del círculo íntimo –le
dijo a Crítica de la Argentina una fuente muy cercana al ministro de
Justicia.
De hecho, Lanata no figura en la base de datos de empleados del
ministerio ni de ninguna de sus dependencias. Pero la sola mención de
su nombre generó sugestivos silencios en el RENAR: los gestores que
frecuentan la sede de Bartolomé Mitre 1465 y los peronistas históricos
de Quilmes lo señalan como asesor del Registro Nacional de Armas.
–Opera ahí adentro. Andá y velo. Anda siempre por el segundo piso, y
atiende ahí.
Esta semana, el fantasma jugó con este diario a las escondidas. En el
celular de Lanata que aparece en la agenda de Forza atiende una voz
masculina que niega llamarse así.
La fama de “mi primo” llegó hasta la Plata: allí aseguran que Martín
fue “buche” de la Bonaerense y luego comenzó a circular como
colaborador informal del ministro del bigote.
Desde agosto de 2006, el RENAR, que estaba en la órbita del Ministerio
de Defensa, depende de la cartera de Justicia. Aníbal Fernández
designó al frente del organismo a Andrés Matías Meiszner, de 35 años,
hijo de José Luis, ex presidente de Quilmes y ex segundo de Julio
Grondona en la AFA. Hay quienes lo anuncian como un candidato de
Aníbal para 2009 o 2011. Meiszner tiene un secretario tristemente
famoso: Alejandro Giancristóforo, a quien todos señalan como el
“recaudador” del organismo. Pero lo más colorido de Giancristóforo
tiene que ver con los electrodomésticos: es uno de los acusados por el
“caso del freezer”. Giancristóforo fue acusado por la esposa de su
padre, un sindicalista conocido como Cacho Rey, ahora fallecido, que
en realidad se llamaba Sebastián Giancristóforo (sé que todo esto
parece una telenovela venezolana, pero es así). Gladis Pérez, la
“madrastra” de Alejandro, lo acusó ante la Justicia de haber
atropellado a un peatón, cargado su cuerpo hasta la casa y luego
haberlo ocultado en un freezer. Gladis aseguró que Alejandro y su
padre discutieron dónde poner el cuerpo con el ex intendente de
Quilmes y delfín de Aníbal Sergio Villordo, quien sugirió la “solución
Garbarino”. Giancristóforo y Villordo fueron sobreseídos por la
Justicia el año pasado.
La esposa de Damián Ferrón, María Fernanda Izquierdo, declaró ante el
fiscal Yacobucci que el día anterior a las tres desapariciones, por
accidente, descubrió un arma de fuego debajo del asiento del
acompañante de la Vitara bordó.
–¿Qué hace esa arma ahí? –le preguntó a su esposo.
–Es de Sebastián –le dijo–, que trabaja para la SIDE y está en el
“negocio” de los laboratorios porque no le alcanza el sueldo.
Forza, en un diálogo con una amiga íntima que se incluye en el
expediente, le cuenta por qué portaba armas:
–Estoy haciendo una investigación sobre medicamentos ilegales.
Sebastián recibió siete disparos: cuatro en la cabeza y tres en el
pecho. Una de las armas era una 9 milímetros, igual a otra de las que
él estaba autorizado a portar.
(Investigación: Jorge Lanata / Jesica Bossi / María
Helena Ripetta
http://www.criticadigital.com/index.php?secc=nota&nid=13028
CASO FORZA
Se entregó Salerno, presunto instigador del triple crimen
Esta mañana se presentó ante la justicia el hombre sindicado por la
justicia como el cerebro detrás de los asesinato. "Soy inocente", se
defendió.
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27.10.2008 | 16:34
José Luis Salerno | Foto: Telam
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José Luis Salerno, señalado por la querella como presunto instigador
del triple crimen de General Rodríguez, se entregó esta mañana en el
juzgado federal de Zárate Campana y aseguró: "No tengo ni idea, yo no
tengo nada que ver, soy absolutamente inocente", dijo, al pasar, a los
medios de comunicación apostados en la puerta del juzgado.
Ya durante el fin de semana, el abogado Herman Schumascher había
anticipado que Salerno planeaba presentarse voluntariamente ante la
justicia para poder responder a partir del lunes como testigo ante el
juez Federico Faggionato Marquez, hecho que se produjo hoy, tras
varios días prófugo.
La orden de captura del empresario y ex socio de Damián Ferrón fue
librada el jueves por la noche, cuando al parecer estuvo en Salta.
Para su abogado, Shumascher "no hay pruebas suficientes" que ameriten
una orden de detención contra su cliente.
La Justicia dictó la captura de Salerno el jueves, pero la noticia se
filtró a la prensa antes de que se realizaran los procedimientos para
poder atraparlo: cuando los investigadores revisaron su casa en el
country "Boca Ratón" y en su farmacia, no lo encontraron.
Además de Salerno, también son buscados ocho mexicanos que se sumaron
a las imputaciones y que tenían vinculación con Jesús Martínez
Espinoza, sindicado como jefe del Cartel de Sinaloa en el país que fue
atrapado, Paraguay. Esos nuevos sospechosos con orden de captura
estuvieron con Martínez Espinoza alojados en el hotel Libertador de
Olivos, entre febrero y marzo, y hay registros de que desde allí se
trasladaban al laboratorio de Ingeniero Maschwitz, precisaron a DyN
las fuentes del caso.
Fuente: DyN
http://www.perfil.com/contenidos/2008/10/27/noticia_0021.html
Declaran los detenidos por el triple crimen de General Rodríguez
Una funcionaria comunal, un policía bonaerense, un ex guardiacárcel y
tres familiares del dueño de una mansión allanada serán indagados,
informaron fuentes del juzgado a lanacion.com
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Jueves 13 de noviembre de 2008 | 09:38 (actualizado a las 10:01)
Una funcionaria comunal, un policía bonaerense, un ex guardiacarcel y
tres familiares del dueño de una mansión allanada en General Rodríguez
serán indagados hoy por el juez Federal de Campana que investiga la
ruta de la efedrina para la elaboración de drogas sintéticas.
Fuentes vinculadas a la causa informaron a lanacion.com que el juez
Federico Faggionatto Márquez planea interrogar durante esta jornada a
la funcionaria comunal de General Rodríguez Cristina Otero, al
teniente primero de la policía bonaerense Darío Atrio, al ex
penitenciario Miguel Angel Lombardi y a los padres y un hermano de
Hernán De Carli, el dueño de la mansión allanada ayer, que se halla
prófugo.
De Carli, que decía ser agente del grupo policial de elite SWAT, no
estaba presente y tiene pedido de detención. Se supone que se
encuentra en Miami.
En la residencia, situada en una zona de casaquintas de General
Rodríguez, la policía secuestró una camioneta 4 x 4 con patente de
Florida, Estados Unidos.
Los allanamientos se dieron horas después de la declaración de un
testigo de identidad reservada.
Tags: Triple crimen , efedrina , detenidos
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1069581&pid=5364490&toi=6258
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1069581&pid=5364490&toi=6258
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